Esta unión tiene muy pocas probabilidades de sobrevivir. Las necesidades afectivas, sociales y familiares de cada uno de estos signos son tan diferentes de las del otro, que lograr ensamblar una pareja será muy difícil, aunque nada es imposible.
Mientras que Aries necesita estar rodeado de muchas personas en el ámbito social y le dedica mucho tiempo a sus amigos, Cáncer se concentra en la pareja y en los hijos. Si bien cultiva amistades y es muy querido por estas, no son su prioridad y es posible que le recrimine a Aries toda la energía y el tiempo que emplea fuera de casa.
Por otra parte, mientras Cáncer es muy previsor, Aries se lanza cuando ve la oportunidad, y esto podría llegar a exasperar al cangrejo. El dinero tiene un gran valor para Cáncer, mientras que para Aries es un elemento que va y viene, por ello lo gasta sin pensar si mañana lo necesitará.
Cuando Cáncer comience a solicitarle a Aries que lo contenga y lo consuele en uno de sus tantos ataques de melancolía, el carnero sentirá que le falta el aire y que está al lado de una persona que le saca energía. Es entonces que Cáncer se sentirá desamparado y su melancolía se tornará tristeza crónica.
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